Cuando duermo. … Viajo

Me deslizo sobre  pastizales, sobre los arboles, sobre el agua. Puedo sentir el frio de la brisa y el amanecer.   Viajo a lugares desconocidos y conocidos al mismo tiempo, comparto con personas que nunca he visto, vivo en otra casa, otra familia, otro espacio del universo.

Cuando duermo… viajo a lugares especiales.

Una vez era un gran pez, que nadaba a la cabeza de un gran cardumen, éramos grandes y bellos y nos deslizábamos sobre el mar entre cielo y agua. Podía escuchar el sonido de nuestras aletas al romper el mar en un avance veloz. Debíamos llegar a un lugar y parecía  que estábamos contra el tiempo.

De pronto se me acercó un pez con otro diferente a nosotros, un poco asustado y solitario. Nadó a mi lado hasta que llegamos a una playa de piedras. La velocidad hizo que nos deslizáramos sobre las piedras donde pudimos ponernos de pie y seguir nuestro camino. Teníamos piernas pero nuestro amigo solitario no tenía. Con emoción y pena nos despedimos con un gran abrazo y continuamos  nuestro camino…